Nutrición y estética

Nutrición y estética
Nutricionista Lima

sábado, 30 de julio de 2011

¿Qué son los gases?







Los gases intestinales son sustancias químicas volátiles (vapores) que, en condiciones normales, se encuentran en el tracto gastrointestinal en cantidades variables. Fruto de la mala absorción de azúcares y de la fermentación de los alimentos por causa de la existencia natural de determinadas bacterias, así como del aire deglutido con la comida y bebida, estos gases van almacenándose en el estómago y ambos intestinos.

Este aire acumulado (los gases) es en su mayoría inodoro. Sin embargo, existe una mínima cantidad de él que no lo es, debido a que contiene determinados compuestos
Sulfurosos. Todo esto depende, claro está, del tipo de dieta que se siga y, sobre todo, de las características químicas de cada persona.

¿Cómo se producen?

Los gases intestinales derivan de distintos procesos. En un 90 por ciento de los casos, su origen se encuentra en el aire que se ha deglutido con la comida o bebida. Este aire estaría compuesto de oxígeno, nitrógeno y dióxido de carbono.

Sin embargo, el 10 por ciento restante se debe a la acción de la flora bacteriana que, en condiciones normales, se encuentra en el intestino grueso (colon). Estas bacterias actúan de diferente forma en una persona u otra, según se haya ingerido un tipo u otro de alimento, sobre todo si estos son asimilados deficientemente en el intestino delgado y pasan al colon en su estado natural.
Las bacterias intestinales se encuentran por millones en el colon y son necesarias para múltiples funciones del organismo. Sobreviven consumiendo alimentos no digeridos en la parte alta del aparato digestivo (intestino delgado).

Se alimentan preferentemente con carbohidratos (almidón, algunos azúcares y fibras) que escapan a un proceso digestivo previo. Entre los productos de esta acción bacteriana está la generación de gases como el hidrógeno y los metanos.

¿Qué síntomas pueden causarte?

Está claro que, dependiendo de cada persona, los síntomas serán unos u otros. En general, los gases intestinales pueden ocasionar el tener la sensación de hinchazón en el vientre o cierta opresión abdominal (que puede obligar a desabrocharse, por ejemplo, el cinturón o cambiar de postura mientras se está sentado).
Sin embargo, hay que tener presente que los gases no son graves, pero sí muy molestos, sobre todo si uno no consigue expulsarlos. Además, el hecho de acostarse tras comer provoca la ralentización de la digestión, con lo que la sensación de albergar una gran cantidad de aire en el estómago también es mayor.


Entradas populares

Seguidores