Demasiadas galletas, demasiada leche: La falta de sueño en Nochebuena también puede causar aumento de la Grelina, la hormona del hambre, y la disminución de la Leptina, la hormona que le indica al cerebro que ya no debe comer. “Nos vamos a comer todas las galletas que están a nuestra vista”, señala Decker.
Mientras que Santa está indudablemente quemando algunas calorías viajando alrededor del mundo la noche anterior a Navidad, nosotros pensamos que necesita un mejor combustible que galletas con azúcar añadida y vaso tras vaso de leche.
De acuerdo con la base de datos nutricionales de la USDA (Departamento de Agricultura de los Estados Unidos), una galleta simple de azúcar hecha con masa pre cocida tendrá alrededor de 73 calorías por unidad.
Eso significa que si Santa come solo una galleta por cada casa (el noticiero ABC estima que Santa visitaría 132 millones de casas alrededor del mundo cada año), esas 2, 336, 000,000 calorías todas en una noche, sin contar las chispitas de chocolate, el glasé y todas las variaciones de galletas posibles – y antes de cualquier vaso de leche, el cual aporta 137 calorías por taza.
Ni siquiera contaremos la cantidad de vueltas a la manzana que deberán dar él y la Sra. Claus para quemar todas esas calorías.
Por el contrario, Santa debería medir sus porciones, comiendo una sola galleta grande o 2 galletas pequeñas, y disfrutar cada bocado. Además deberá escoger 3 tazas de leche baja en grasa, nada más.
Si queremos ayudar a Santa podemos dejarle algunos snacks saludables, como galletas integrales decoradas con frutos secos. En cuanto a la leche, la mejor opción sería la leche baja en grasa. Dado que Santa ya tiene la circunferencia de cintura demasiado grande, y eso lo pone en riesgo de enfermedades cardíacas, debe mantener un bajo consumo de grasas saturadas. Una opción sería recurrir a la leche de frutos secos que son una excelente fuente de vitamina E y tiene la mitad de calorías que la leche entera.
