La dieta libre de gluten no está del todo justificada
No
podemos negar que las dietas libres de gluten están full moda. Pizza, galletas,
panes…todo libre de gluten, incluso muchas celebridades de Hollywood hacen
alusión a sus nuevas dietas libres de gluten y otros alérgenos.
Aquellas
personas con una gran intolerancia al gluten sufren de una enfermedad celiaca,
la cual es diagnosticada con análisis de sangre e intestinales. Esto significa
que los pacientes con esta enfermedad tienen una respuesta inmunitaria a la
gliadina, una de las proteínas del gluten que se encuentra en el trigo, centeno
y cebada. Los síntomas van desde fatiga crónica, diarrea, hinchazón y dolor de
cabeza hasta retraso del desarrollo en niños pequeño
Pero,
¿qué pasa con aquellos que no dan positivo a la enfermedad celiaca, pero que
tienen síntomas tipo celiacos? Los doctores muchas veces recomiendan un ensayo
de eliminación de algunos alimentos para determinar si la comida es la
culpable. Aquellos que refieren que la eliminación de gluten ayuda a disminuir
la severidad de los síntomas son frecuentemente diagnosticados como “no
celiacos sensibles al gluten” – esto no puede ser probado como la enfermedad
celiaca, pero esta basada en la referencia de pacientes.
Pero,
¿solo el reporte de los pacientes justifica la restricción de la dieta? Un nuevo
estudio publicado en los “Anales de Medicina Interna” sugiere que no
necesariamente. Los autores refieren que no hay suficiente evidencia clínica
para justiciar la idea de que los síntomas de los pacientes son aliviados en la
ausencia de gluten.
Por
el contrario, es muy posible que la sensibilidad no celiaca al gluten sea
realmente un efecto “nocebo” (creer que algo va a hacer daño, a pesar de no
estar recibiendo el factor negativo) –influenciado por el marketing
nutricional, moda de las celebridades, investigaciones de salud inconclusas y
los reportajes. En lugar de hacer una dieta de eliminación del gluten se debe
consultar con un profesional para
realizar un estudio doble ciego controlado para determinar la causa exacta y no
estar influenciados por creencias sobre el consumo de gluten.
Debe
prevalecer el “sentido” sobre la “sensibilidad” para prever que se crea que el
gluten es tóxico para la mayoría de la población. Debemos prever que un posible
problema de salud se convierta en un problema social.